Este año mi carta tiene solamente una petición; me gustaría que por una vez se alcanzara en este país un PACTO POR LA EDUCACIÓN.
Ya es hora que los políticos dejen de hacer tantas barbaridades y oigan la voz de la escuela, esa voz que pide un cambio real.
Ese cambio debe ir unido a un programa de inversiones para mejorar no solamente los espacios sino los medios.
En la escuela lo más importante son los niños y las niñas, pero no podemos olvidar el gran trabajo de maestros y maestras que junto a la labor de las familias caminan para “educar para el futuro”
Majestades confío que este anhelo sea una realidad.
Atentamente