Siempre he tenido una admiración por muchas de las acciones que Pilar Rubio ha realizado en programas televisivos, una demostración del reto y del esfuerzo para conseguir cosas.
Sus declaraciones en una cadena de televisión sobre sus entrevistas con los tutores o tutoras de sus hijos, dejan a Pilar Rubio en ese grupo de personas que no tienen claro lo que es la educación.
La educación es un trabajo conjunto entre la escuela y las familias, por eso es necesario un diálogo continuo con estas, y ese diálogo continuo se realiza desde que se inicia el curso escolar.
Pilar Rubio no entendía por qué se hacen tutorías a principio del curso. Pues sencillamente porque hay tres meses que no hay ese contacto con la escuela y hay que perfilar los inicios del curso y los objetivos del curso para así poder realizar una primera ficha de la observación realizada.
Hay que tener presente y muy importante: la tutoría no es para tener tiempo libre los maestros y maestras. La tutoría es para ayudar a las familias.
Bajo este planteamiento los jugadores no tendrían que tener pretemporada, y el entrenador no debe hablar con ningún jugador hasta que no llegue Navidad porque todo lo que haga es perder el tiempo.
Pilar Rubio, sus comentarios no fueron acertados y se equivocó y lo cortes sería reconocerlo y poner el valor de los maestros y maestras.